El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, aseguró que las fuerzas de su país están infligiendo bajas «gigantescas” a los invasores rusos cerca de la ciudad de Vuledar, en la región oriental de Donbás. En su habitual mensaje videograbado distribuido por distintas redes, el mandatario reconoció que la situación no es fácil para las tropas ucranianas, que pese a todo resisten en sus puestos.
«La situación es muy complicada. Y estamos luchando. Estamos doblegando a los invasores e infligiéndoles bajas gigantescas”, sostuvo, antes de mencionar a las ciudades ucranianas donde los combates se han concentrado en los últimos meses. «Mientras más bajas sufra Rusia allí en el Donbás, en Bajmut, en Vuledar, Marinka, Kreminna, más rápido podremos poner fin a esta guerra con la victoria de Ucrania”, aseguró.
Zelenski explicó que la Comandancia en Jefe de sus Fuerzas Armadas, así como los comandantes locales en los distintos frentes, le entregaron reportes de la situación sobre el terreno. «Escuché reportes detallados de cada posición de combate, de cada zona (…) Estamos analizando la situación, haciendo todo para preparar nuestras acciones para el futuro inmediato”, apuntó.
Más fuertes, más débiles
Esta misma jornada, en entrevistas concedidas a medios italianos a horas de que llegue a Kiev la primera ministra Giorgia Meloni, Zelenski adelantó que la ofensiva rusa tan anunciada podría comenzar en los próximos días, pero garantizó que Ucrania es mucho más fuerte que hace un año, cuando comenzó la invasión ordenada por el régimen de Vladimir Putin.
«Esta semana podemos enfrentarnos a la revancha de Rusia, se habla de una ofensiva en camino. Hay nerviosismo. Algunas partes de Ucrania han estado viviendo así desde 2014. Pero los rusos no son tan poderosos como lo eran hace un año, cuando de todos modos no tenían suficientes recursos para ocupar nuestro país. Hoy ellos son más débiles y nosotros, en cambio, somos más fuertes», aseguró Zelenski.
Agregó que «la guerra será corta» y se llegará a la victoria. «Cuanto más rápido sea menos víctimas tendremos. En 2014 se congeló el conflicto y no nos fue bien. Los acuerdos de Minsk le dieron tiempo a Putin para preparar el repentino ataque del año pasado, pero no volveremos a caer en la misma trampa. Nuestros soldados están más motivados porque defienden a sus familias, sus hogares. En cambio, hemos visto que las sanciones económicas contra Moscú son de gran ayuda, nos dan tiempo y espacio para organizarnos”, añadió.
DZC (EFE, Reuters)
