El ministro de Defensa de Rusia, Serguei Shoigú, afirmó este martes (02.05.2023) que Rusia está tomando medidas para aumentar la producción de armas y poder cubrir las necesidades de las tropas que combaten en Ucrania. «Las acciones de las tropas en el marco de la operación militar especial dependen en gran medida de la reposición oportuna de las existencias del armamento», reconoció durante una reunión con la cúpula militar rusa. «Ahora es necesario duplicar la producción de armas de alta precisión a la mayor brevedad posible», enfatizó.
Además, hizo una estimación de las bajas ucranianas. «Pese a la ayuda militar sin precedente por parte de los países occidentales, el enemigo sufre pérdidas significativas. Solo el mes pasado perdieron más de 15.000 hombres», dijo Shoigú, sin precisar el carácter de las bajas por parte de Ucrania. En el mismo período, añadió, las tropas rusas destruyeron ocho aviones, 227 drones, 430 tanques y otros vehículos blindados, 18 lanzaderas de misiles de bocas múltiples, 225 piezas de artillería y morteros.
El titular de Defensa no mencionó las bajas en la filas rusas, de las que Moscú no informa desde de septiembre del año pasado, cuando la cifró en 5.937 muertos. Según datos difundidos ayer por Estados Unidos, desde diciembre pasado las fuerzas rusas han sufrido 100.000 bajas, de las cuales 20.000 son muertos, mientras Kiev prepara una contraofensiva que parece inminente.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo en su rueda de prensa telefónica diaria que estas cifras «son absolutamente inventadas». «Washington no puede citar ningún tipo de cifra adecuada, no disponen de estos datos y como tal debemos tomarnos» las declaraciones del portavoz de la Casa Blanca, John Kirby. Según el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, desde el inicio de la guerra han muerto en total 191.420 efectivos rusos.
lgc (efe/rtr)