Gobernador McKee: El presidente Trump y los republicanos del Congreso ponen en riesgo la asistencia alimentaria SNAP para millones de estadounidenses
140,000 habitantes de Rhode Island podrían perder sus beneficios del SNAP a partir del 1 de noviembre si no se toman medidas federales
PROVIDENCE, RI – El gobernador Dan McKee criticó hoy al presidente Trump y a los republicanos del Congreso por su prolongada inacción durante el cierre del gobierno federal, que ahora amenaza los beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), financiados con fondos federales, para 42 millones de estadounidenses en todo el país, incluyendo aproximadamente 140,000 residentes de Rhode Island.
La administración Trump ha informado a Rhode Island que, durante el cierre, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos no distribuirá los beneficios del SNAP a los estados a partir de noviembre. En Rhode Island, la pérdida de los beneficios del SNAP significaría aproximadamente $29 millones en asistencia nutricional faltante cada mes o $348 millones al año, un costo federal astronómico que Rhode Island no puede absorber.
“El presidente Trump y los republicanos del Congreso comenzaron este cierre con maniobras políticas con la cobertura médica de millones de estadounidenses. Ahora, su continua inacción amenaza la crucial asistencia alimentaria para quienes más la necesitan”, declaró el gobernador McKee. “Hago un llamado al presidente Trump para que priorice a las personas por encima de la política y tome medidas inmediatas para resolver este problema sin más demora”.
Ante la escasez de alimentos en los bancos locales, el Gobernador convocó hoy a los líderes municipales para alertarlos sobre este posible problema y solicitar a cada municipio que inicie la comunicación con sus bancos de alimentos locales. La Administración McKee está coordinando actualmente un esfuerzo para movilizar fondos estatales con socios comunitarios y organizaciones filantrópicas para complementar los suministros de las despensas de alimentos y los centros de distribución de comidas de Rhode Island. Para ello, insta a los habitantes de Rhode Island con recursos disponibles a donar a sus despensas de alimentos locales para garantizar que ningún ciudadano pase hambre.